Calles en silencio pero viviendas con ruido

En nuestro último artículo hablábamos del silencio que había en nuestras calles, nos encontramos con la bajada de la contaminación acústica en nuestra ciudad a causa del confinamiento debido al COVID-19, y ahora hablamos del ruido que hay en las viviendas y comunidades de vecinos.

Dos grande focos de ruido como son los establecimiento de ocio y el tráfico rodado, en este periodo están mas silenciados que nunca pero aún así no se consigue tener unos niveles aceptables de ruidos en nuestros hogares.

A consecuencia de pasar muchas horas en casa, se disparan los conflictos entre vecinos. La música alta en balcones, peleas familiares, ladridos de perros, zapateo debido a hacer deporte en casa, alto volumen del televisor a horas intempestivas, reuniones en zonas comunes, se han convertido en la principal fuente de conflictos vecinales durante este periodo en el que se han disparado las denuncias por molestias relacionada con el ruido. Hay más horas de convivencia comunitaria y muchas de las personas pasando graves problemas económicos por primera vez en sus vidas, sus estados de ánimos están más caldeados y los choques son más habituales.

Por otro lado, este confinamiento por desgracia, también ha traído consigo un aumento de discusiones entre parejas, incluso sobrepasando los límites y comunicando las autoridades el aumento de denuncias por violencia de género que se han dado en estos días. Existe el teléfono 016, el cual ha salvado muchas vidas, y no está demás recordarlo para que no dudes en utilizarlo, tanto si eres maltratado/a por tu pareja como, si eres testigo de ello. El teléfono es gratuito y no queda registrado en el listado de llamadas de la factura que le enviará su proveedor de telecomunicaciones.

Si eres víctima de un vecino ruidoso, no dudes en llamar a las autoridades y no caer en provocaciones ni discusiones o peleas que terminen por castigarse con multas de altas sanciones económicos o en el peor de los casos, penas de cárcel dependiendo de las lesiones ocasionadas y antecedentes previos.

Si por el contrario, quieres respetar al máximo a tus vecinos, recuerda los horarios y decibelios permitidos pero que sobre todo, usa el sentido común para no solo evitar ruidos, sino también en época de covid, contagios, sobre todo si vives en una comunidad con personas mayores.

Si algo ha traído el coronavirus a nuestras vidas tras obligarnos a confinarnos para no caer contagiados y padecer síntomas bastante peores que la gripe, que están causando miles de muertos en el país, es el buen corazón de muchas personas que día tras día ayudan a sus mayores a hacer la compra, cuerpos policiales que vigilan el cumplimiento de la ley y evitan delitos, cajeros/as heróicos/as, y sobre todo, el personal sanitario en primer frente de batalla.

Curioso como mientras el ruido proveniente de las calles es el principal problema de muchas hogares, tras la llegada del covid 19, este se haya trasladado a las casas y esté aumentando el número de denuncias entre vecinos.

Conseguir el silencio en casa es más difícil de lo que parece, quizá una buena opción sea irse a vivir al campo, la naturaleza es una vecina ejemplar.

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