Saber para qué se utiliza la lana de roca es fundamental a la hora de conseguir una buena eficiencia energética. Además, tiene numerosas aplicaciones dentro de sectores como la construcción, la acústica, el industrial y el agrario. Vamos a ver qué se puede hacer con esta roca volcánica.
Para qué sirve la lana de roca
La lana de roca se emplea fundamentalmente en la industria y en la construcción. Gracias a su baja conductividad térmica y alta densidad, en construcción presenta unas propiedades perfectas en aislamiento térmico y acústico de cerramientos.
También es muy efectiva en tratamientos contra el fuego, ya que al provenir de rocas volcánicas, presenta un elevado punto de fusión siendo prácticamente ignífuga, presentando numerosos campos de aplicación en procesos industriales.
En agricultura, puede utilizarse como cultivos hidropónicos, sustituyendo el suelo natural por mineral que permiten a las raíces un aporte de compuestos químicos que facilitan el desarrollo de las plantas.
Los profesionales en acústica la emplean gracias a su densidad y a sus propiedades, que posibilita el aislamiento de espacios cerrados donde se quieren conseguir buenos niveles de sonido evitando reverberaciones y ecos.
Cómo se aísla una pared con lana de roca
Si quieres saber cómo aislar una pared con lana de roca, debes saber que hay varias formas de realizarlo. Estas son las más empleadas:
- Mediante Inyectado o Insuflado: este proceso de aislamiento se realiza en el interior de las viviendas y presenta la ventaja de que puede ejecutarse sin la realización de mucha obra. Para ello, es necesario saber si los muros presentan cámaras de aire. En ese caso, se realizan agujeros en las paredes para insuflar la lana de roca en las cámaras.
- Mediante trasdosado directo: la lana de roca se adhiere a la pared mediante clavos especiales. Pueden usarse en rollos o en planchas.
- Trasdosados autoportantes: pueden ser interiores o exteriores. Consiste en la colocación de unos paneles con la lana de roca en su interior fijados mediante una estructura al muro.
Ventajas de la lana de roca frente a otros aislantes
Ahora que sabemos para qué se utiliza la lana de roca, sería conveniente saber si merece la pena utilizarlo como aislante. La composición de la lana de roca hace que presente muchas ventajas con respecto a otros tipos de materiales. Estas son las más significativas:
- Aislamiento térmico: la estructura de este material contiene aire seco, teniendo una baja conductividad térmica, que permite bajas transferencias de calor.
- Aislamiento acústico: gracias a su estructura elástica y multidireccional, disipa la energía sonora y frena las partículas del aire evitando fenómenos como reverberaciones y ecos.
- Protección contra el fuego: debido a su origen volcánico, presenta un elevado punto de fusión, soportando mucha más temperatura que el resto de los materiales. Es uno de los materiales indicados en usos especiales en construcción donde la resistencia al fuego es necesaria.
- Protección frente a la humedad: gracias a su estructura fibrilar, es un material hidrófugo. Su gran resistencia al paso del vapor de agua impide la aparición de condensaciones.
- Contribuye al medio ambiente: es un material que abunda en la corteza terrestre, por lo que es altamente sostenible y, además, altamente reciclable. Aislar con lana de roca reduce las emisiones de CO2, los gases de efecto invernadero y lluvia ácida en el medio ambiente.
Saber para qué se utiliza la lana de roca es conocer cómo aislar térmica y acústicamente de forma efectiva. Y es que este material cumple con los requisitos perfectos para conseguir la eficiencia energética, además de su fácil colocación, su sostenibilidad, sus grandes beneficios acústicos y el resto de propiedades que presenta.