En este momento en el que un tal CORONAVIRUS está conquistando España, el SILENCIO ha llegado a nuestras calles. En algunas áreas de nuestro país y, más concretamente en Andalucía, se están consiguiendo alcanzar los objetivos de calidad acústica que exigen las normativas, e incluso algunas zonas ZAS (zonas acústicamente saturadas) que no tenían remedio y que era impensable reducir su nivel de ruido, se han silenciado. Las terrazas y veladores de los bares están cerradas, en las calles y avenidas mas transitadas de nuestras ciudades circulan muchos menos vehículos, cada vez circular menos trenes, vuelan menos aviones y, desafortunadamente, el silencio ha llegado de la peor forma posible.
A título personal os puedo decir que me cabreaba mucho despertarme con el ruido del tráfico rodado de una de las calles mas transitadas del municipio de Linares, y ahora, me despierto prácticamente en silencio y os aseguro que echo de menos ese ruido de fondo, que tanto me molestaba antes pero que decía a gritos que mi ciudad estaba viviendo. Imagino que todo es bueno en su justa medida.
El nivel de ruido que he registrado en el balcón de mi vivienda a las 14:00 horas, generado principalmente por el tráfico rodado en la calle Julio Burell del municipio de Linares es de 55 dBA. El objetivo de calidad acústica aplicable a áreas urbanas existentes en sectores del territorio con predominio de suelo de uso residencial, en periodo diurno, es de 65 dBA, 10 dBA de diferencia es una auténtica pasada. Cuando pase todo esta pesadilla y volvamos a nuestra vida cotidiana habitual haré la misma medición en el mismo momento del día y seguramente nos quedaremos asombrados con la diferencia. Esto queda pendiente y ya os informaré de ello.
En este momento, en el que lo peor está por llegar, lo único que se me ocurre decir es “¡¡SHHHH!!”, ¡SILENCIO!, tenemos que hacer callar a nuestras ciudades y nuestros pueblos, quedarnos en casa, cuidar y disfrutar de nuestras familias, y sentirnos afortunados por pasar por esta situación con todas nuestras necesidades cubiertas, con medios de entretenimiento de todo tipo y con la gran compañía que son nuestros seres queridos. Ahora, eso sí que os pido, hacer todo el ruido que podáis cada día a las 20:00 horas desde vuestros balcones para darle las gracias a todas aquellas personas que están cuidando de nosotros de una u otra forma, poniendo en riesgo su vida y la de su familia. A toda esta gente que vela por nosotros tenemos que darle las gracias y enviarle todo el ánimo del mundo para que sean fuertes y puedan seguir adelante en estos días que vienen que serán los peores.
Tan solo hace un momento que han pasado las 20:00 de la tarde, y como cada día toda mi familia salimos al balcón para aplaudir a toda esta gente que se lo merece. Para mí es un momento muy emotivo al que no me acabo de acostumbrar, todos y cada uno de los días desde que empezó la cuarentena se me pone un pellizco en el estómago y los pelos de punta, al sentir los aplausos, vítores, canciones… y al sentir que, en ese justo momento, todo Linares se une y se acompaña en una situación tan desagradable pero que hace florecer la bondad y solidaridad de las personas. Pues bien, hoy no he hecho palmas, sino que he registrado el nivel sonoro que se genera cuando gran parte de los habitantes de mi municipio sale a sus balcones a aplaudir por todos los profesionales que están combatiendo a este virus.
Bueno, pues durante los aplausos se alcanza un nivel sonoro de 69 dBA. ¡Enhorabuena! Ciudadanos de Linares, solamente con nuestros aplausos incumplimos los objetivos de calidad acústica. Creo que nos podemos sentir orgullosos, y no cabe duda de que nos hacemos oír. Con todo esto lo que quiero decir es que juntos podemos con todo, y que somos el PUEBLO UNIDO el que puede conseguir lo que se proponga. Espero que esta situación sirva para muchas cosas y nos haya enseñado mucho, tan solo espero que no se nos olvide demasiado pronto y que luchemos siempre juntos.
POR TODOS Y CADA UNA DE ESAS PERSONAS QUE SE JUEGAN LA VIDA POR NOSOTROS, TENEMOS QUE QUEDARNOS EN CASA, ES LA ÚNICA MANERA DE AYUDARLOS Y DE FRENAR ESTE MALDITO VIRUS. Aprovechemos este tiempo para descansar, leer, ver pelis y series, no hacer nada… todas esas cosas que echamos en falta en nuestro día a día y que siempre nos quejamos que no podemos hacer. Este es el momento de hacerlas porque cuando pase esto tendremos que trabajar muy duro, sobre todo lo que somos autónomos, ya que tendremos que levantar de nuevo nuestros negocios.
MUCHO ÁNIMO, NOS VEREMOS PRONTO POR LAS CALLES….